Con la Ley Ómnibus frenada, cuáles son los temas de la agroindustria que seguirán esperando

Con el regreso de la Ley Ómnibus a Comisión, los temas vinculados a la actividad agroindustrial que habían quedado incluidos dentro del paquete quedan también ahora en compás de espera, pero con mayores interrogantes a futuro sobre la posibilidad de sus transformaciones.

La adhesión a UPOV 91 para modernizar el uso y propiedad en semillas, el marco regulatorio para el faenamiento de animales y normativas de las carnes y la desregulación en biocombustibles con su abanico de aspectos, continuarán de manos abiertas, como preguntándose ¿y ahora qué?

Por supuesto que todos los aspectos particulares que estaban en debate, quedan tapados por el contexto general de la tormenta política que significa este retroceso, en medio de reproches cruzados y críticas feroces desde La Libertad Avanza a los sectores que no acompañaron o pusieron trabas.

Qué significa la vuelta a Comisión

En el Reglamento de la Cámara de Diputados, el Artículo 155 determina las consideraciones de un proyecto que vuelve a Comisión. La regla aclara que “un proyecto que, después de sancionado en general, o en general y parcialmente en particular, vuelve a comisión, al considerarlo nuevamente la Cámara, se le someterá al trámite ordinario como si no hubiese recibido sanción alguna”.

En el caso de la Ley Ómnibus, ahora deberá analizarse desde un inicio, por lo que será sometido a debate en un plenario de comisiones de Legislación General, Presupuesto y Hacienda, y Asuntos Constitucionales. Se tiene que obtener un nuevo dictamen, y posteriormente si eso ocurre, se podrá convocar a una sesión en el recinto para que los diputados vuelvan a debatir el tratamiento general de la ley.

Lo que ocurrió en Diputados, como redundan la mayoría de los análisis, fue básicamente no cumplir con la primera regla no escrita del Parlamento, que es no ir al recinto sin los votos necesarios. Las frenéticas negociaciones con opositores pero principalmente con los denominados dialoguistas, no alcanzaron para torcer el rumbo de un paquete de medidas cuyo nacimiento venía mal barajado.

Desde el sector agroindustrial, se había establecido una relativa tranquilidad cuando se retiró el paquete fiscal y por ende la propuesta de subir las retenciones, pero había mucha expectativa sobre los temas mencionados que habían quedado adentro.