A la ralentización de las importaciones de fertilizantes y herbicidas, insumos clave para el campo, tanto por cuestiones macroeconómicas como logísticas, se suma ahora la particularidad de que el precio de las ventas internas que se logran concretar no se fijaría sino hasta el año que viene.
En este contexto, particularmente, alertan que las importaciones de urea se ubican en el nivel más bajo en 7 años. También, el ingreso de otro insumo clave como glifosato se encuentra limitada. Se estima que Argentina importa un 70% de los fertilizantes que utiliza para su producción agropecuaria.
Estos son algunos de los datos que surgen de un reciente informe publicado por el Departamento de Información Agronómica de la Bolsa de Cereales de Córdoba (DIA-BCCBA).
Fertilizantes
Un primer dato que se desprende del informe de la bolsa cordobesa que la importación de urea en septiembre del corriente año, según datos del INDEC, ha caído un 66% comparado con septiembre del año pasado, pasando de 184 mil a 62 mil toneladas importadas. Además, se establece como uno de los valores más bajos para el mes de los últimos 5 años.
Por su parte, la importación de superfosfatos hasta el mes de septiembre se ubica como la más baja de los últimos 7 años, sumado a que tiene una diferencia de 28.350 toneladas respecto al segundo valor más bajo.
En materia de precios, considerando la urea, fosfato monoamónico y diamónico y el superfosfato simple y triple, los precios han disminuido interanualmente, experimentando variaciones del -3% (como el caso de los fosfatos, cuya línea se superpone), del -6% (como la urea y el superfosfato simple) y del -21% para el superfosfato triple, cuyo precio varió de US$ 990 por tonelada en noviembre de 2022 a US$ 780 por tonelada en noviembre de 2023.
Herbicidas
Paralelamente, el mercado externo de los herbicidas, principalmente el de insumos como el glifosato y la atrazina, también presenta complicaciones.
Con respecto al glifosato, la importación en el mes de septiembre del corriente año fue de 1.500 toneladas, un 73% menos que en septiembre de 2022, valor se posiciona como el más bajo de los últimos 4 años. “Si consideramos la cantidad importada acumulada hasta el mes de septiembre, que es un poco más de 25 mil toneladas, solo supera al año 2018 que tuvo una importación de glifosatos de 16 mil toneladas”, comentaron los técnicos de la BCCBA.
Respecto al mercado de la Atrazina, si bien se observa una tendencia alcista en la cantidad importada de los últimos años, para el mes de noviembre del corriente año la importación se ubicó en 779 toneladas, lo que representa un 47% menos de lo que se importó en noviembre del año pasado, que fue de 1.482 toneladas.
En cuanto a precios, por un lado, el glifosato enfrentó una caída en su precio pasando de US$ 1000 por tonelada en noviembre de 2022 a US$ 780 por tonelada en noviembre de 2023. Por otro lado, la atrazina 50 y la de 90% experimentaron un aumento en los precios del 5% y 7% respectivamente. Con lo cual, apuntan que el precio de este insumo en noviembre del 2023 se encuentra como el cuarto valor más alto.
Ralentización
Entre las causas de la ralentización evidenciada durante los últimos meses en la importación de estos insumos clave para el campo, la bolsa cordobesa señala que se deben, por un lado, a raíz de complicaciones macroeconómicas.
Pero a esta coyuntura se suma, sobre todo, la falta de aprobación desde el Sistema de Importaciones de la República Argentina (SIRA), que ha contribuido específicamente a que la importación de fertilizantes como la urea y herbicidas como el glifosato se encuentren limitadas.
Y, además como consecuencia de este contexto, se presenta la particularidad de que el precio de las ventas internas que se logran concretar no se fijaría sino hasta el año que viene, advirtieron los técnicos del DIA-BCCBA.
*Fuente: Bolsa de Cereales de Córdoba
