Este viernes 24 de noviembre se celebra el Día del Vino en la Argentina, ya que en esta fecha se lo declaró como Bebida Nacional. Primero fue por decreto presidencial en el año 2010 y posteriormente en 2013 el Congreso aprobó por unanimidad la ley de declaración. A partir de allí, cada año se celebra el valor cultural que tiene el vino y la vitivinicultura, su arraigo con la tierra y su identificación con los argentinos.
Nuestro país es el más importante de América del Sur en este rubro y uno de las 10 más destacados en el rubro vitivinícola mundial. Como dato en relación a su día, fue el primer país del mundo que declaró al vino como su Bebida Nacional.
El vino en algunos números
Actualmente, la vitivinicultura nacional se extiende en 19 provincias (Córdoba entre ellas), con una calidad del vino alta, aún con condiciones de suelo y clima que, en algunos casos, son desventajosas.
Son 223.585 las hectáreas cultivadas con viñedos: Malbec, Cereza, Bonarda, Criolla Grande, Cabernet Sauvignon, Syrah, Pedro Giménez, es decir el 3% de la superficie mundial; nuestro país ocupa el quinto lugar como productor de vinos en el ranking global.
Desde Argentina se exporta vino a 127 países, y los primeros mercados son Estados Unidos, Reino Unido, Canadá, Brasil y Países Bajos. La industria vitivinícola genera más de 106.000 puestos de trabajo de manera directa y 280.000 de forma indirecta. Aproximadamente 17.000 productores cosechan uvas para las más de 900 bodegas que abastecen el mercado interno como externo.
Copas cordobesas
Córdoba cuenta con más de 23 bodegas que ofrecen distintas experiencias enoturísticas, entre las que se cuentan catas, visitas guiadas, servicios gastronómicos e incluso algunas ofrecen hospedaje dentro de los establecimientos.
El vino cordobés se obtiene principalmente en las regiones de Punilla, Calamuchita, Tralasierras, el norte de Córdoba y Sierras Chicas.
A través de la iniciativa turística y cultural los “Caminos del Vino”, desde el Gobierno de Córdoba invitan a recorrer y disfrutar de los establecimientos productivos distribuidos en distintas zonas de la provincia.
En tierras cordobesas, la producción de vino nació con los jesuitas en el siglo XVII, cuando plantaron las primeras cepas en las Estancias de Jesús María. Actualmente la provincia es dueña de una amplia variedad de uvas añejadas en robles, cuyos vinos de crianza permiten evocar hierbas, flores, frutas, tabacos y cueros con aires serranos.
En este sentido, gracias a la mixtura de condiciones agroecológicas y climáticas de sus diversas regiones, el vino cordobés posee una impronta diferente según los diversos suelos que lo ven crecer. En estos viñedos, destacan el Malbec, el Cabernet Sauvignon, el Pinot Noir y el Isabella (frambua), entre otros.
Para consultar más información sobre el “Camino del Vino cordobés” en el siguiente enlace https://www.cordobaturismo.gov.ar/
