La semana comenzó con bajas en las cotizaciones de los principales granos negociados tanto en el Mercado de Chicago como en Rosario.
En la plaza estadounidense, por un lado, los abundantes suministros de trigo del Mar Negro y la amplia oferta de maíz estadounidense presionaron la cotización de los cereales. En tanto, la soja finalizó con leves bajas mientras los operadores monitorean las condiciones meteorológicas en Brasil.
En el mercado local, se observó un nivel de operatoria discreto en términos generales con cotizaciones bajistas entre los principales granos negociados en el recinto rosarino.
Chicago
“Los futuros de soja culminaron en terreno mixto, aunque prácticamente estables en relación con la rueda previa”, señaló la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) en su reporte diario. Los operadores siguen de cerca el clima extremadamente cálido en Brasil, mientras que la lenta demanda estadounidense y ventas técnicas presionaron los contratos de más largo plazo.
El maíz también finalizó a la baja, “debido a ventas técnicas y a las preocupaciones sobre la demanda por los abundantes suministros estadounidenses de la nueva campaña”. Pero la debilidad del dólar puso un piso a las caídas, informaron los analistas rosarinos.
Y los contratos de trigo anotaron pérdidas, “presionados por la débil demanda de exportación del cereal estadounidense y la fuerte competencia de exportación de los proveedores de la región del Mar Negro”, indicaron. A lo que se sumó, al igual que en el caso del maíz, la debilidad del dólar que limitó las pérdidas.
Rosario
“El mercado de soja contó con un incremento marginal en la cantidad de compradores que pujaron por hacerse de mercadería. En materia de precios, se presentaron importantes bajas con relación al día viernes”, sintetizaron desde el recinto de la bolsa rosarina.
En este sentido, el precio abierto y generalizado entre las fábricas locales para la posición disponible y para las fijaciones cayó $ 22.000 entre ruedas y se ubicó en $ 215.000 la tonelada, “valor que quedó lejos de lo pretendido por la parte vendedora”, señalaron.
En cuanto al maíz, “hubo un corte en el abanico de posibilidades de entrega y un descenso en la cantidad de compradores activos”, informaron.
De esta manera, por el cereal con entrega contractual se ofrecieron abiertamente $ 110.000, unos $ 5.000 menos entre jornadas. Para las fijaciones de mercadería, la oferta también descendió a $ 110.000, guarismo que estuvo por debajo de los $ 125.000 vistos el día viernes. Y, a diferencia del cierre de la semana anterior, no se registraron ofertas abiertas por maíz del próximo ciclo comercial.
Y el mercado de trigo local “contó con buena presencia de participantes activos. Ya con la cosecha en marcha, fue el tramo disponible el que presentó mayor dinamismo”, apuntaron.
En materia de precios, por el cereal con entrega inmediata se ofrecieron de forma abierta y generalizada $ 125.000, unos $ 7.000 por debajo del viernes. La entrega contractual cayó $ 10.000 y quedó a $ 125.000. Mientras que por la mercadería con entrega diferida, la posición diciembre se situó en $ 125.000 y enero en $ 127.000, lo que representó una caída de $ 10.000 y $ 13.000 respectivamente.
