Estiman que en la campaña 2022/23 se sembrarían unas 200.000 hectáreas menos de maíz en la Argentina.
De esta manera, tras seis campañas consecutivas de crecimiento, se confirmaría una baja en la intención de siembra con el cereal. No obstante, la cifra supera con creces el promedio histórico.
Estos son algunos datos que surgieron del último Panorama Agrícola Semanal (PAS) publicado por la Bolsa de Cereales de Buenos Aires.
Vaso medio lleno
El área con maíz sufrió un ajuste y ahora se proyecta una superficie total destinada al maíz con destino grano comercial de 7.500.000 hectáreas para la nueva campaña.
En términos relativos tomando en cuenta esta nueva estimación, la actual proyección refleja una reducción interanual del área sembrada del -2,6 %, es decir, unas 200.000 hectáreas por debajo de la campaña previa en la que sembraron 7,7 millones de hectáreas.
No obstante este retroceso, la cifra proyectada representaría un incremento del 7 % en comparación al promedio del último quinquenio.
Escenario
Con estos números, “el escenario general muestra una tendencia negativa, aunque heterogénea en términos de superficie a implantar, explicó la entidad porteña en su reporte.
Entre los factores de esta caída, señalaron “la variabilidad de los rindes recolectados durante el ciclo previo, un nivel de reservas muy ajustadas en el inicio de la ventana de siembra temprana del cereal, una relación insumo/producto más desfavorable en relación a campañas pasadas, y un aumento importante de los costos que disminuye los retornos en un ambiente de alta incertidumbre”.
También, señalaron que “aumenta la competencia directa de cultivos con menores requerimientos de inversión, como la soja de primera, especialmente en el centro del área agrícola”.
El informe completo con el Panorama Agrícola de la BCBA, a continuación.