En un mercado absolutamente volátil, teñido por la incertidumbre que genera a nivel mundial la invasión de Rusia a Ucrania y tras las fuertes subas registradas en jornadas precedentes, los precios de los granos se hundieron en Chicago por una fuerte toma de ganancias.
De esta manera, la soja dejó atrás máximos en 9 años que la llevaron a tocar los u$s 645 durante la semana, cerró la jornada con importantes bajas de casi de u$s 30 y perforó el piso de los u$s 600 por tonelada que venía manteniendo en las últimas ruedas.
Por el lado de los cereales, los futuros de maíz culminaron con caídas del orden del 5%, y el trigo también cerró con caídas de casi u$s 30, a pesar de que más temprano en la rueda había tocado un máximo desde 2008 en la plaza norteamericana. No obstante, la volatilidad a lo largo las ruedas diarias, los granos cerraron la semana con un saldo acumulado dispar en sus cotizaciones.
Soja
En una semana marcada por los acontecimientos bélicos del Mar Negro, los precios de la soja cerraron con importantes bajas en Chicago. El poroto registró pérdidas de entre u$s 26 y u$s 23 y quedó a valores de entre u$s 584 y u$s 578 según posiciones. Los derivados también se hundieron y registraron caídas de u$s 71,66 el aceite y de u$s 18,30 la harina.
Estos fuertes retrocesos en las cotizaciones de la oleaginosa se dieron “en medio de mayores ventas en la plaza física estadounidense y de una toma de ganancias general de los fondos de inversión tras las fuertes subas de las jornadas precedentes”, explicó Granar en su reporte diario.
“Además de las cuestiones técnicas que movieron a los administradores de los fondos a retirar ganancias, entre los inversores están quienes creen que el contexto generado por la invasión de Rusia sobre Ucrania podría dar lugar a un adelantamiento de la suba de tasas por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos”, añadieron. “Otros optaron por resguardar ganancias al ver que las sanciones impuestas a Rusia resultan insuficientes”, comentaron.
En la misma línea y de acuerdo a la interpretación de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), las bajas también se “debieron a que se registró un fuerte cambio en el flujo del dinero antes del fin de semana, dada la incertidumbre de lo que ocurrirá con el conflicto del Mar Negro en los próximos días”.
Así, tras los fuertes cimbronazos experimentados a lo largo de las ruedas diaria, la soja culminó la semana con un saldo acumulado levemente negativo.
Trigo
Tras operar en la ronda del jueves en límite de alza, el trigo cerró con fuertes bajas en el mercado de Chicago, a donde las posiciones marzo y mayo registraron pérdidas de u$s 30,49 y de u$s 27,56 respectivamente. No obstante, el cereal quedó por arriba de los u$s 300 por tonelada. En Kansas también se registraron fuerte bajas para marzo de u$s 28,02 y para mayo u$s 27,55, al igual que en el mercado europeo, donde contratos los marzo y mayo del trigo perdieron € 25,50 y € 24 por tonelada.
“La toma de ganancias de los inversores tras el rally alcista de las jornadas precedentes fue la principal razón de la caída de las cotizaciones”, indicó Granar. “Ese movimiento de los especuladores tuvo mucho de fundamentos técnicos, pero también respondió a cuestiones como la ausencia de una respuesta global más contundente en contra de las acciones militares desarrolladas por Rusia en Ucrania”, explicaron.
Suma a la presión bajista, el hecho de que los embarques de trigo desde los puertos del Mar Negro “están actualmente comprometidos y, de prolongarse las hostilidades, habrá compradores que comenzarán a impacientarse por la chance de no recibir en tiempo y en forma el grano ya comprado”, agregaron desde la firma corredora de granos.
En este contexto, todo conduce “a más volatilidad en los próximos días” en el mercado del trigo. No obstante, las fuertes caídas en sus cotizaciones no le impidieron al grano fino terminar la semana con balance positivo.
Maíz
Luego de seis jornadas alcistas consecutivas, el maíz terminó la rueda de Chicago con fuertes bajas, en línea con el resto de los granos. El cereal retrocedió casi u$s 14 y quedó a valores de entre u$s 259 y u$s 253 la tonelada según posiciones.
Al igual que la soja y el trigo, el grano amarillo quedó “sometido a una importante toma de ganancias de los grandes fondos de inversión, en medio de la crisis bélica en la zona del Mar Negro”, señaló Granar. “El comercio está prácticamente paralizado desde los puertos de Ucrania y de Rusia. Si sólo eso contara para hacer subir o bajar los precios, la tendencia debería ser al alza. Pero como no es sólo eso lo que cuenta, cuestiones financieras y técnicas, acentuadas por temas políticos y por sanciones consideradas insuficientes, volcaron el fiel de la balanza de los precios hacia la baja”, añadieron.
En el espacio de los fundamentos propios del mercado agrícola, “los pronósticos de lluvias abundantes durante el fin de semana en el extremo sur de Brasil, sumaron a la corriente bajista de los precios, dado que implican una recomposición de la humedad en los suelos de la región brasileña que arrastraba déficit hídrico y, por consiguiente, una mejora en las perspectivas para la segunda cosecha”, explicaron los analistas de la firma corredora de granos.
En el acumulado semanal, el cereal logro culminar la semana con un saldo levemente positivo en sus cotizaciones en la plaza norteamericana.
