No bien algo acalladas las estridencias de los festejos, el ministro de Economía y candidato presidencial en campaña, Sergio Massa, informó que el denominado Programa de Incremento Exportador (PIE) tendrá continuidad con una nueva ampliación del “Dólar-Agro”, al que ahora se le agrega «Balotaje». Para las operaciones de venta al exterior, la divisa estadounidense se situaría en $ 520/530.
La medida, convenientemente, se extenderá a todos los sectores exportadores, entre ellos del agro, hasta el 17 de noviembre.
El decreto 549/2023 ya fue publicado en el Boletín Oficial, con lo cual este esquema verá su finalización prácticamente pegado al ballotage que definirá al próximo ocupante de la Casa Rosada.
El nuevo dispositivo de incentivos para exportar significa que, sobre el volumen exportado, el 70% de las divisas deberá liquidarse al tipo de cambio oficial, mientras que el 30% podrá hacerse al tipo de cambio financiero, vía Contado con Liquidación (CCL). Cabe señalar que en la última edición la liquidación era de 75%/25% respectivamente.
Distintos economistas sostienen que la ecuación determina un tipo de cambio o cotización de la divisa norteamericana de entre $ 520 a $ 530. Como lo indicó el propio Massa, el beneficio se ampliará a diferentes sectores de la agroindustria: “Desde mañana para fortalecer las reservas argentinas, vamos a ampliar el Programa de Fortalecimiento Exportador a todas las actividades, todo el complejo exportador argentino, bienes intermedios, bienes terminados, productos primarios y servicios”, expresó.
Esta fue la primera medida tomada luego de su triunfo en los comicios de primera vuelta, con la finalidad de conseguir reservas para las arcas del Banco Central en los próximos días. El anuncio de la medida lo realizó en una reunión con miembros de la prensa extranjera, en la sede de la cartera de Economía.
Con esta ampliación, el denominado PIE abarcaría, ahora sí, a todo el complejo exportador. La iniciativa tuvo su comienzo con la soja en el mes de septiembre del año pasado y, posteriormente, a fines de ese año, se reinició. En abril pasado, se incorporaron otra cadenas y rubros del sector agroindustrial, incluidas algunas economías regionales. A partir de allí, fue el “Dólar-Agro”, y con esa nuevo nombre tuvo su última entrega en septiembre. La saga continúa.
El decreto, a continuación.
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