Tras las fuertes subas de la ronda anterior, los principales commodities agrícolas operaron con saldo dispar en la plaza norteamericana.
El trigo continúa con su senda alcista en Chicago y ya alcanza un nuevo máximo en 14 años, mientras que el maíz y la soja cerraron con caídas.
La invasión de Rusia a Ucrania, que ya lleva 7 días de ataques y bombardeos, sigue siendo uno de los factores determinantes de la volatilidad en el mercado de granos.
Soja
Los precios de la soja terminaron la rueda diaria de Chicago con bajas superiores a los u$s 10 en casi todas las posiciones y quedó a un valor de entre u$s 616, u$s 611 y u$s 600 para los contratos marzo, mayo y julio respectivamente. Los derivados también registraron bajas de u$s 7,50 (u$s 1.672,55) el aceite y de u$s 6,61 (u$s 504,48) la harina.
Estos retrocesos en los precios de la oleaginosa, encontraron fundamento en “una toma de ganancias de los fondos de inversión tras las fuertes subas de las dos jornadas precedentes”, en las que el poroto llegó a acumular una suba de casi u$s 40 entre ruedas y alcanzó un máximo desde 2012, señaló Granar.
También se sumaron cono factores bajistas “el alivio que significaron las recientes lluvias sobre zonas productoras de la Argentina y la imposibilidad de recibir el aceite de soja adquirido en la zona del Mar Negro”, agregó la firma corredora de granos. “Vale destacar que la fuerte suba de precios acentuó la entrada del grano de la nueva cosecha brasileña en el circuito comercial, acción que también influyó sobre la tónica bajista de Chicago”, añadieron.
En la misma línea, desde la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) explicaron que “el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania generó preocupaciones acerca del suministro global de aceite de girasol, dado que ambos países en conjunto representan el 80% de las exportaciones mundiales. Este hecho impulsó a los aceites vegetales en general, lo cual se tradujo en un aumento en los precios de la soja en los últimos días”.
Trigo
Los precios del trigo volvieron a subir con fuerza y alcanzaron un nuevo máximo en 14 años a medida que la invasión de Rusia a Ucrania continúa generando preocupaciones acerca de la oferta global del cereal. En Chicago, registró subas de entre u$s 20 y casi u$s 28 según posiciones y cotizó a valores de entre u$s 388 y u$s 389 por tonelada. En Kansas también registro fuertes subas de u$s 22,59 (marzo) y de u$s 26,55 (mayo).
“La incertidumbre sobre cuándo y cómo se logrará reestablecer el comercio de trigo desde la zona del Mar Negro, mientras se acentúan los enfrentamientos bélicos entre Rusia y Ucrania, continúan consolidando el raid alcista del grano fino”, señaló Granar en su informe.
“El combo de mares cerrados, terminales portuarias bajo fuego y sanciones financieras para entidades bancarias rusas abruma a los compradores”, indicaron los analistas de la firma.
A lo que se suman rumores de todo tipo: “desde subsidios que el gobierno de Putin daría a los productores para enfrentar las pérdidas que les implica no poder vender a la exportación y el derrumbe del rublo, hasta la chance de un veto a oficial a las ventas externas para sumar reservas estratégicas”, añadieron.
Maíz
En tanto, el maíz cerró con leves bajas en las primeras posiciones en Chicago y pérdidas de entre u$s 5 y u$s 6 para los contratos de julio y septiembre, por lo que operó a valores de entre u$s 290 y u$s 273.
Como fundamento, se señaló una “toma de ganancias muy parcial de parte de los fondos y una entrada importante de grano en el mercado físico, de parte de los productores que buscan capturar valores atractivos”, explicó Granar.
En este caso, al igual que para la soja y el trigo, “las preocupaciones sobre la oferta global de granos amarillos mientras se sostiene el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania impulsaron a las cotizaciones del cereal. No obstante, la toma de ganancias terminó presionando a los precios”, señalaron los analistas de la BCR en su reporte diario.
