“Que resolviera un problema, que funcionara bien al solucionarlo y que fuera linda”. Así tenían que ser las máquinas para el campo que concebía el creador de la fábrica Ascanelli, Don Ricardo Ascanelli, que comenzó hace seis décadas con un modesto taller, tan modesto como él mismo lo era.
Sus continuadores, Roberto y Sergio, “nacieron” prácticamente dentro de la fábrica, hace 62 y 60 años respectivamente, y recordaban, conversando con Agroverdad, que desde chicos trabajaban en ella.
Ayer, en Expoagro, celebraron los 60 años de trayectoria de la empresa familiar.
Hasta que quede linda
Evocaron que cuando Don Ricardo iniciaba la construcción de una nueva máquina, tenían muchas veces que empezar de cero media docena de veces. “Pero, por qué Papá”, le preguntaban ellos, luego de desarmar “fierros” y volverlos a armar. Y Don Ricardo, meticuloso, les respondía: “hasta que quede linda”.
“Esa es una característica de origen de nuestras máquinas: que resuelvan problemas al productor o al contratista, que a esos efectos funcionen perfectamente bien y que estén dotadas de toda la tecnología de vanguardia que hoy se tiene o se puede desarrollar. Pero, además, que sean lindas”, expresaron los hermanos.
Acto en Expoagro
El acto de celebración de los 60 años tuvo lugar en el stand que la fábrica ocupa en Expoagro 2022.
Sus continuadores y actuales titulares, Roberto y Sergio Ascanelli, decidieron que la megamuestra brindaba el marco apropiado para el acontecimiento.
Durante su desarrollo, recibieron reconocimientos de distintos ámbitos gubernamentales e institucionales, y de la propia Expoagro: Patricio Frydman, gerente comercial de la muestra entregó a los hermanos una plaqueta recordatoria de la celebración.
Desde los inicios a ahora
En conversación con Agroverdad, Sergio recordó los inicios: “se hacían comederos de hacienda y elevadores de cereal que en ese entonces tenían 8 o 10 metros, llegamos a hacerlos hasta de 18 metros. Luego se fabricaron tolvas graneleras, al principio de 6000 kilos después de 10.000 con 4 ruedas. No pensábamos que íbamos a llegar a tolvas de 33 toneladas y que pronto estaremos lanzando unidades 40 y 45 toneladas”.
En relación a las tolvas autodescargables, Roberto destacó que se producen de 2, 4 y 6 ruedas, con un exclusivo eje autodireccionable. A esa línea de equipos se suman las embolsadoras, los mixer verticales y otro icono de la fábrica, las sembradoras equipadas con la última tecnología de siembra, que salen de fábrica con el sistema de Precision Planting.
Doña Lidia
Roberto y Sergio, junto con la recordación de su padre y sus lecciones de sabiduría, tanto de vida como de construcción de equipamientos para el campo, tributaron homenaje también a su madre, Doña Lidia de Ascanelli, “que todas las mañanas abría las puertas de la fábrica”.
60 años después de aquellos comienzos, la fábrica es el sustento de 130 familias en forma directa, más todo el entramado de trabajo indirecto que genera.
—
