Cada vez más la robotización y la inteligencia artificial se están aplicando en la agroindustria, con resultados sorprendentes.
Con este panorama, Gustavo Grobocopatel, de Grupo Los Grobo, consideró que “en poco tiempo hablar de transgénicos será medieval” y aseguró que “la edición genética modifica todo, baja costos y democratiza”.
El empresario, que disertó en el Seminario ACSoja 2018 realizado en Rosario bajo el lema “Soja, motor del desarrollo sustentable argentino”, dijo que “la tendencia en siembra directa es la robotización. Veremos robots impresos en 3D que siembren, y eso podría ser una oportunidad para la industria de la maquinaria”.
Y fue más allá al sostener que con la “agricultura de precisión, la robotización y el mayor uso de tecnología vamos a transformar nuestros campos en campos de ensayo; vamos a poder ensayar procesando la información que generamos en nuestros campos. Podremos tener el INTA en nuestros campos”.
En ese marco, bregó por la necesidad de innovar y ante el nuevo paradigma productivo afirmó que “el desafío es si vamos a ser los protagonistas o consumidores. La captura del valor agregado va a estar en quien pueda desarrollar y ser pionero y nosotros estamos distraídos atajando penales”, en clara alusión a los cambios de reglas para la agroindustria.
En ese marco, sostuvo que “le estamos dando la oportunidad a los competidores” de avanzar y ser líderes.
Rechazo a las retenciones
En la Bolsa de Cereales de Rosario, los empresarios y referentes sojeros no dejaron pasar la oportunidad de cuestionar el regreso de las retenciones.
“En Argentina, en 20 años se triplicó la capacidad de molienda; las retenciones detuvieron el crecimiento de la soja” dijo Roberto Urquía, de Aceitera General Deheza .
“Espero que la gente de la Secretaría de Agroindustria se rectifique rápidamente”, agregó el empresario cordobés.
Y fue más allá al aseverar que “el 90% de la exportación de soja estará en manos de China. La competitividad es la clave para buenos valores de venta”.
Al respecto, añadió que “vamos a ir a parar a manos de China, que nos va a pagar el poroto lo que quiera. Hay que industrializar; pero el Gobierno parece que no entiende”.
Por su parte, Luis Zubizarreta, presidente de ACSoja, dijo que “si bien la cadena es competitiva el costo impositivo es sofocante”.
“Solicitamos que se reviertan las medidas tomadas a corto plazo”, agregó el directivo.
*Especial: Mariana Scalerandi
