La voraz plaga del gusano cogollero ha causado estragos en África y podría amenazar a millones de agricultores en Asia, mientras India lucha contra la primera infestación reportada del continente, advirtieron expertos de la ONU.
La plaga, que devora los cultivos en la etapa de oruga de su ciclo de vida, prefiere el maíz pero puede alimentarse de unos 80 cultivos, incluidos arroz, vegetales, maní y algodón.
En este sentido, señalaron que «podría tener un impacto devastador en los productores de maíz y arroz de Asia (…). Es una amenaza que no podemos ignorar», dijo en un comunicado el representante regional de la Organización de Alimentos y Agricultura (FAO), Kundhavi Kadiresan.
El gusano cogollero, nativo de las regiones tropicales y subtropicales de las Américas, se ha extendido rápidamente por África desde que se detectó en el oeste del continente a principios de 2016.
Millones de has. y agricultores
Más de 200 millones de hectáreas de maíz y arroz se cultivan anualmente en Asia, que produce la mayor parte del arroz del mundo. Y China es el segundo país productor de maíz en el mundo detrás de los Estados Unidos.
La FAO señalo que el gusano cogollero podría amenazar a millones de pequeños agricultores que dependen de sus cultivos para obtener alimentos y obtener ingresos. El sur de China y el sudeste de Asia están en mayor riesgo debido a su clima, agregó.
El Consejo Indio de Investigación Agrícola envió una alerta de plagas a fines de julio después de que se detectó gusano cogollero en el estado suroccidental de Karnataka. Los medios indios informaron que la plaga se estaba extendiendo a un ritmo alarmante en la región. El cogollero se caracteriza porque puede volar 100 kilómetros por la noche y la hembra puede poner hasta 1.000 huevos.
Métodos artesanales
Casi todos los países subsaharianos han informado infestaciones que han afectado a millones de hectáreas de cultivos y amenazado la seguridad alimentaria de más de 300 millones de personas, según la FAO.
La agencia de la ONU dijo que estaba ofreciendo orientación a los gobiernos y granjeros asiáticos sobre cómo identificar y lidiar con el gusano cogollero.
En África, las escuelas de campo de la FAO han capacitado a miles de agricultores para reconocer y reportar infestaciones.
A los agricultores se les ha enseñado cómo aplastar la plaga a mano y frenar su propagación con bioplaguicidas hechos de plantas como el neem y el tabaco o mediante el uso de depredadores naturales como las hormigas.
Otros métodos incluyen la aplicación de ceniza, cal, arena o tierra a las partes de plantas infestadas.
