Con el objetivo de apuntar a una mayor eficiencia ganadera a partir de una mejor relación alimento-kilaje, entre otros aspectos, se inauguró en el Campo Escuela de la Facultad de Ciencias Agropecuarias de la UNC el nuevo Módulo Estación de Testaje.
La iniciativa no tiene antecedentes a nivel país, ya que se trata de la primera en el ámbito de una casa de altos estudios para la generación de información estadística valiosa, que será utilizada por el sector ganadero. El proyecto inicial partió de cabañeros cordobeses, con un gran impulso en particular de Mauricio Groppo, de la tradicional cabaña La Sultana, y contó con el apoyo institucional y económico del Gobierno de la Provincia, a través del Ministerio de Agricultura y Ganadería.
En el acto de inauguración del Módulo, estuvieron el decano de la FCA, Jorge Dutto; el titular de la cartera productiva provincial, Sergio Busso, acompañado por la secretaria de Ganadería, Catalina Boetto; y también cabañeros, docentes y estudiantes.
Medición y eficiencia
“Más allá de medir un montón de atributos de los animales, lo verdaderamente importante de esta Estación de Testaje es que tiene incorporados unos comederos especiales e individuales, que a su vez poseen una báscula; todo esto se conecta a un sistema que lleva la información en cada una de las mediciones: toda vez que el animal entra a comer, un chip capta esa actividad y se establecen parámetros de la ingesta. A partir de las diferentes pasadas, se va determinando el aumento de peso del animal en función de la ración consumida. Básicamente, se mide lo que llamamos eficiencia de conversión”, explicó el cabañero Mauricio Groppo en diálogo con Agroverdad.
En su momento, Groppo, ex alumno de la FCA, acercó la idea al por entonces decano Marcelo Conrero, y a partir de allí se emprendió un camino que, en función de lo que requería la magnitud del proyecto, involucró a la Provincia y sumó la colaboración de distintas asociaciones de razas bovinas.
“Y no solo es importante por la mejora de la eficiencia, también lo es a nivel cuidado del ambiente, ya que un animal más eficiente en la relación ingesta-peso, emite menos gases para efecto invernadero. Y los beneficiarios son múltiples: la Facultad con sus docentes y alumnos; los cabañeros; y las asociaciones de criadores que contarán con información valiosa”, expresó Groppo.
Vínculo público-privado
“En este vínculo que no nos cuesta, que fluye solo con el Ministerio de Agricultura, esta vez sumamos otros actores, porque aquí está involucrado el sector privado a través de los cabañeros, de las empresas que aportaron el equipamiento para la Estación de Testaje”, dijo por su parte el decano Jorge Dutto.
“Acá hoy veíamos también a productores feedloteros que se van a beneficiar con esto, porque van a comprar animales que tengan esa prestación de poder aumentar el peso con mucho menor consumo, estamos hablando de hasta un 20% menos de consumo y hasta un 15% de mayor eficiencia en convertibilidad”, agregó.
Por su parte, el ministro Sergio Busso hizo referencia a lo importante que es para el estado ver cómo los aportes se concretan rápidamente, no obstante obstáculos como la pandemia: “Esto surgió antes de la pandemia, de manera que ver todo listo es un orgullo. El trabajo conjunto es el motor para dar respuesta a una demanda de algo que no existía, y es para destacar la gran cantidad de prestaciones que tendrá. Los productores necesitan tener buenos reproductores, medidos y avalados por una casa de altos estudios como la FCA”.
