La continuidad de las lluvias en zonas productoras estadounidenses fue el principal factor que impulsó las caídas en los precios de la soja y del trigo. En tanto, el maíz subió de la mano de excelentes perspectivas comerciales.
Los tres principales commodities agrícolas terminaron la semana acumulando un saldo positivo en el mercado de Chicago.
La soja registró un alza semanal del 5,06 %, seguido por el maíz con un 3,57 % y el trigo con ganancias en el orden del 0,59 % (en Chicago) y del 1,46% (en Kansas).
Cotizaciones
El poroto de soja anotó bajas de entre u$s 0,90 y u$s 1,10 según las posiciones y quedó por debajo de los u$s 500. Por el lado de los derivados, el aceite registró una leve baja de u$s 0,66 (u$s 1351,36) y la harina perdió u$s 2,54 (u$s 390,40).
“La continuidad del tiempo húmedo sobre el Medio Oeste fue el principal fundamento bajista. El mercado tomó estas condiciones climáticas como favorables para los cultivos, pero habrá que ver hasta dónde acumulados repentinos importantes, acompañados de tormentas de vientos, son realmente «constructivos» para las plantas que ya maduraron”, analizó Granar en su informe diario.
También sumó presión a los precios, “la falta de certezas sobre la política de la Casa Blanca en cuanto a los biocombustibles, con versiones periodísticas que aseguran que la Agencia de Protección Ambiental (EPA) finalmente recomendó para 2021 un mandato de corte en el nivel de 2020 y la posibilidad de elevarlo para 2022”, agregó la firma corredora de granos.
Por su parte, desde la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) apuntaron “que la proximidad de expiración de los futuros también actúa como impulsor de las caídas. No obstante, el alentador panorama comercial limita las bajas, con más ventas a China”.
No obstante, las bajas registradas este viernes, en el acumulado semanal resumido por Granar, la oleaginosa quedó con un saldo positivo.
Luego de transitar la mayor parte de la ronda de operaciones con altibajos, el maíz terminó con precios en leve alza en Chicago, que consolidaron así un balance semanal positivo.
“Las importantes precipitaciones que se registraron sobre el oeste y el norte del Medio Oeste dividieron a los operadores, entre quienes consideraron que aún son benéficas para los cultivos y quienes sostuvieron que llegaron tarde para reparar lo que creció con defectos, sobre todo en Minnesota”, indicó Granar.
Además, suman preocupación a los operadores las tormentas tropicales que podrían llevar “mucha agua a las regiones del Sudeste de los Estados Unidos, donde la recolección del cereal ya comenzó”, añadieron.
La demanda fue un factor que sostuvo los precios del cereal, ya que “las ventas externas siguen robustas y a buen ritmo, lo que dinamiza el mercado y apuntala las alzas. En este contexto, a tres días de terminar la campaña de maíz estadounidense, nos encontramos con un nivel de ventas histórico, con además muy buenas perspectivas comerciales para el año comercial 2021/22”, analizaron desde la BCR.
Para el caso el grano amarillo, la fluctuación de sus precios a lo largo de las rondas de operaciones también dejó un balance semanal positivo.
Los precios del trigo terminaron a la baja en un “mercado que estuvo atravesado por una toma de ganancias de los inversores tras las importantes subas del jueves y por la presión de la creciente competencia por la entrada de la cosecha del hemisferio Norte en el circuito comercial”, sintetizó Granar.
Otro factor que le sumó presión bajista al cereal es el tema de “las retenciones móviles de Rusia, principal exportador mundial, que aportan incertidumbre al mercado, al no poder predecirse con claridad su nivel en vista de las fluctuaciones de los precios domésticos”, apuntaron los analistas de la BCR.
En el acumulado semanal, el cereal quedó con una variación levemente positiva en sus cotizaciones.
