Hay confianza en que la economía china se recuperará del impacto que le provocó la pandemia de Coronavirus, que eso sucederá en el transcurso de este mismo año y reactivará paulatinamente las importaciones. Tal pronóstico, ¿desbordará favorablemente para la Argentina?. Sí, pero no hay que hacerse grandes esperanzas de que nuestro país tendrá una demanda extraordinariamente vigorosa.
Esto se desprendió de la conferencia on line del ciclo que la Bolsa de Cereales de Córdoba organizó acertadamente con los Agregados Agrícolas de dos naciones y un bloque continental de indudable gravitación en los números del comercio exterior de la Argentina: China, Brasil y la Unión Europea.
La ronda fue inaugurada por el Agregado en la embajada en Pekín, Hernán Aníbal Viola (Teléfono: 008610-6532-0789 / 90 (int. 10) / E-mail: hviola@magyp.gob.ar / viola@agrichina.org ), a quién presentó el presidente de la BCCBA, Cr. Juan Carlos Martínez, destacando su conocimiento del coloso asiático, dónde se ha desempeñado en los últimos 8 años.
De la exposición del funcionario, a entender del Editor de Agroverdad, son aleccionadoras las medidas que –más allá de las responsabilidades que ha tenido en la génesis de esta crisis global y del ocultamiento de información- adoptó el gobierno chino desde que le estalló la pandemia.
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Las medidas se cumplen
>> Viola recordó que un “disparador” del virus fue el Año Nuevo chino, cuya manera tradicional de ser celebrado fue determinante para “se diseminara fuertemente”.
>> Tras casi tres meses terribles, a mediados de marzo comienza a verificarse una baja y control de “la tasa de contagio”.
>> Recién entonces empiezan a flexibilizarse las rigurosas medidas adoptadas y reactivarse tímidamente la economía, desde el 19 de marzo.
>> No obstante, se ha prohibido el ingreso de extranjeros y “no se pueden hacer viajes por negocios”. Su reanudación “dependerá de cómo evolucione” la situación.
>> Las medidas de cuarentena “se respetaron muy fuertemente”, pues los ciudadanos chinos “son muy controlados”.
>> La “flexibilización” se dará “de a poco”.
>> “Todo el mundo usa barbijos”, una consigna que en China no se discute ni conjetura. Se utilizan “no tanto porque uno puede contagiarse sino porque si la persona es portador “asintomático”, no cause contagios”.
>> La pandemia y la crisis obliga a armarse de “mucha paciencia”.
La economía
>> La caída del PBI en el primer bimestre del año fue del 2% al 4,5%, dijo Viola, apuntando que es difícil precisarla por las características del sistema chino.
>> El FMI había estimado que este año China crecería un 6%. Ahora, tras el gran impacto, se calcula que el país se irá recuperando pero los cálculos de mejora del PBI son variables, desde un modestísimo 0,5% al 5,5%. El gobierno de Pekín publicita que podría alcanzar el 6%.
>> Se podría, consecuentemente, pensar en incrementos de las importaciones en “algunos sectores”, señaló Viola, aunque no fue demasiado preciso, sobre todo en cuanto puede esa inferencia derramar hacia la Argentina.
>> “Quizás a mediados de abril se vea un aumento de demanda, por caso de carne”, conjeturó.
>> Recordó otra de las crisis que padeció China, la de la Peste Porcina Argentina, por la cual perdió “el 50% de su stock de 400 millones” de cabezas. Por lo cual va a seguir necesitando cubrir ese tremendo bache y, en particular, sus stocks estratégicos.
>> Aunque hay una definida decisión por incentivar y hacer fuertes inversiones para recuperar a ese sector.
>> Viola descreyó que se vuelvan a alcanzar los altos niveles de precios de algunos meses de 2020.
>> En medio de esta fenomenal emergencia, Pekín y sus empresas han empezado “a presionar renegociación de contratos a la baja” y, por otro lado, por la paralización de actividades durante la cuarentena derivo en “embarques y pagos retenidos”.
El Acuerdo con Estados Unidos
>> Viola recordó que en 2019 China y Estados Unidos arribaron a un “pre-acuerdo” en su guerra comercial.
>> Hay que esperar que se vance “el Acuerdo Fase 1” y que esto derivará en que “China aumente sus compras de productos agrícolas” … a Estados Unidos. Y también de carnes, en particular porcina.
>> En consecuencia, ese entendimiento favorecerá a Estados Unidos, no tanto a otros productores, como Argentina.
>> También países de Europa del Este pueden ser mejor beneficiados, en especial, porque no producen OGM. China –hay que saberlo- tiene “predilección” por esos productos, aparte de ser ella misma una “gran productora” de no-transgénicos.
>> China, ya desde antes de la pandemia, China aplica un control “muy exhaustivo” en los puertos, y “cada vez es más estricto”, “con un alto nivel de tecnificación”. O sea –apunte del Editor, no de Viola-, aunque ellos venden cualquier cosa no reciben cualquier cosa. Obviamente, también eso es una “herramienta” comercial.
> Viola habló de que para Argentina “se abren oportunidades”, como ya se puntó antes no fue muy preciso. Hizo una enumeración muy general. En su descargo, es cierto que el tiempo de exposición era acotado y debía atender el “cronómetro”.
Trabajo y más trabajo
>> En suma, como siempre y en todas partes, “hay oportunidades” pero estas no vienen solas, sino que el país y sus empresarios tienen que trabajar –o seguir trabajando- fuerte y seriamente para ganar mercados.
>> Viola se puso a disposición de ellos, para evacuar consultar o asesorar. Y esa actitud del Agregado, es más que ponderable.
La Bolsa de Cereales de Córdoba proporcionó los datos de contacto con el funcionario:
Consejería Agrícola en la República Popular China
Lic. Hernán Aníbal VIOLA
11 Dong Wu Jie, San Li Tun
100600, Beijing, PRC, Beiging – República Popular China
Teléfono: 008610-6532-0789 / 90 (int. 10)
E-mail: hviola@magyp.gob.ar / viola@agrichina.org
Web: http://www.agrichina.org/
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