En el marco de su alianza empresaria, Syngenta comenzará a distribuir el curasemilla fungicida biológico Rizoderma desarrollado por Rizobacter y el INTA, y lo incluirá en su portfolio de productos para la campaña de cereales de invierno, informó en un comunicado la empresa argentina.
Se trata de un terápico formulado en base al hongo Trichoderma Harzianum (Rizoderma), de comprobada eficacia para controlar todas las enfermedades de semilla y de suelo que afectan la germinación y desarrollo inicial en el cultivo de trigo.
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Otros registros
Actualmente, está también registrado en SENASA para soja y arroz, y próximamente será aprobado para cebada y legumbres de invierno, como arveja y garbanzo.
Por ser un fungicida biológico, promueve nuevos mecanismos de acción buscando minimizar los riesgos de resistencia a enfermedades y una mayor persistencia de control.
Al mismo tiempo, ofrece nuevas herramientas más sustentables e inocuas para el medio ambiente y usuario final.
El mercado mundial
Si bien será Syngenta Argentina quien dará el primer paso en comercializar este nuevo concepto de protección de semilla, el potencial de expansión y crecimiento es muy superior ya que incluye mercados como el europeo donde la demanda de insumos biológicos es cada vez mayor.
Para tomar de referencia, sólo en Argentina, la tasa de crecimiento de esta tecnología ha sido mayor al 120% año tras año, ocupando más de un millón de hectáreas de trigo durante los últimos tres años.
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