“Al principio no eran más de diez productores: los llamaban “los locos”. Al año siguiente fueron 28. Y al tercer año ya sumaron 80, que se habían sumado a esta relación ganar-ganar que se estableció con la cosecha de maíz con alta humedad”, relató Horacio Alassia, jefe de la Mesa de Negocios Agrícolas de la Cooperativa Agropecuaria Unión de Justiniano Posse, impulsora de esa práctica en su zona de influencia.
Levantan el maíz con humedades del 20 al 25% activando un proceso del que se benefician “todos los eslabones de una larga cadena, desde el productor hasta la llegada de la mercadería al puerto”, apunta el gerente de la entidad, Cr. Hugo Tallone.
Hace cuatro campañas la cooperativa decidió incentivar una línea comercial a través de la cual se estimuló la cosecha anticipada de maíz. Hasta entonces, los agricultores más atrevidos se animaban a trillar con 19. La propuesta fue ir un paso más allá: trillar entre 20 y 25.
Cadena de beneficios
La cooperativa se ha convertido en una referente en la región sureste de la provincia de Córdoba. No es que no se conociera esta recolección anticipada pero “mayormente no se la practica”, comentó el Ing. Federico Sánchez, del INTA Manfredi, quién con un equipo de esa Estación Experimental participó de una Jornada a Campo organizada por la Unión a la que asistieron un centenar de productores.
La Unión ha encarado esta iniciativa con “particular enfasis y entusiasmo” porque está convencida de que está promoviendo “una alternativa viable, positiva e innovadora”, señala Tallone.
“Nosotros definimos que se genera una relación ganar-ganar –explica Alassia-, porque se encadenan una serie de beneficios: para el contratista, porque le permite arrancar antes y “alargar” la cosecha; los fleteros también empiezan antes y no se junta este servicio con el levantamiento de la soja; el productor tiene la opción de escoger y contratar la máquina que desea sin tener que estar pendiente de si le llega o no le llega, evitando los cuellos de botella del momento de furor de la trilla; toda la logística se mejora y nosotros en la cooperativa podemos acopiar anticipadamente”.
No son las únicas ventajas: “hasta el mismo mercado brinda señales favorables, pues es sabido que no es lo mismo el valor febrero-marzo que el de abril-mayo, con diferenciales de entre 5 y 10 dólares según los años, que se pagan por este maíz “primicia””.
Un «spread» de 5 dólares
La cosecha de maíz con alta húmeda demanda mayor consumo de combustible a las máquinas. ¿Se compensa esta “contra”?. “La respuesta sigue siendo favorable a este negocio. El productor tiene la mercadería disponible en la cooperativa un mes antes, consigue un “spread” de por lo menos 5 dólares, dispone del dinero para lo que le haga falta o desee hacer. Hoy (al día de la jornada) tiene el maíz a 165 dólares o 3.200 pesos, cuando abril le está mostrando 157/158 dólares. Aparte, ¿cuánto cuesta o se pierde dejando el maíz en el campo y esperar a trillarlo después de levantar la soja?. ¿Eso, está bien mensurado?. Conforme a nuestro análisis, la cosecha húmeda ofrece muchas ventajas y beneficios”.
«Herramienta»
La Jefa del Departamento Técnico de la Unión, Ing. Carolina Daniele, apunta que el manejo agronómico del maíz es uno solo, sea para cosecha del grano con las humedades convencionales o si luego se trilla con alta humedad.
Carolina pone especial cuidado en reparar que tanto el distanciamiento entre surcos -una parte del campo se hizo a 35 y mostraba un control eficiente de malezas frente al distanciamiento de 52- como la práctica de la cosecha con alta humedad “son herramientas, son alternativas, personalmente no me voy a inclinar ni para un lado ni para el otro. Sí digo que hay que evaluar el ambiente en el cual estamos, en cada lote, y luego actuar en consecuencia”.
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